

En la nueva era del frikismo, encontramos atractivos turísticos de casi todas las series, dibujos y películas de culto.
Desde tours que recorren lugares que aparecen en la series como Sexo en Nueva York o los Soprano… parques de atracciones como el de Harry Potter en Orlando “The Wizarding World of Harry Potter” o sus estudios en Londres. A tiendas completamente repletas de objetos de culto para todo tipo de fans, como la famosa Forbidden Planet London Megastore, donde yo misma caí en la tentación…como buena friki y ahora tengo expuesta en casa mi barita de sauco.
El culto al cine, libros, cómics y desde hace menos tiempo a las series, hacen que una de las motivaciones de los viajeros sean los viajes temáticos.
Empezando por Juego de Tronos, Outlander, El Señor de los Anillos e incluso el Padrino. ¿Quién no ha visitado en Londres el Big Ben? Por encima del cual hemos visto sobrevolar a Harry con su coche mágico ¿y la estación Central de Nueva York?, imaginando como los X-men la reducían a escombros.
Recientemente, buscando un hotel para unos clientes, encontramos un alojamiento que nos hizo saltar de la silla a mi compañera y a mí, habíamos encontrado la casa del “Geni Tortuga” ,como se le dice en Valencia, ó la casa del “Duende Tortuga” en castellano. En realidad el Maestro Roshi para los puritanos….
¡Habíamos encontrado un nuevo lugar para el frikismo de Bola de Dragón!
Yo nunca he sido fan de Dragon Ball, pero mi primera frase fue: ¡Ya tenemos alojamiento en Filipinas!
Lugar, al que por supuesto pienso ir, puesto que la saga también se introdujo en mi infancia y aún actualmente continua colándose en conversaciones en mi grupo de amigos.
La casa por fuera es tal cual a la del Maestro, incluso tiene rotulado Kame House en el exterior. Para los que no lo sepan la palabra Kame en japonés significa tortuga, de ahí el nombre y el caparazón que acompaña al maestro.
No sabemos cómo llegó esta idea a los propietarios de este alojamiento, pero cuando vayamos lo averiguaremos y os tendremos al día.
O también puedes apuntarte a visitarla con nosotras…
Artículo de Lucía Gil